5 de julio de 2007

Leonardo Guevara

(Ver entradas anteriores)




La servidora me sienta a la mesa. Remueve la propina. En su mano derecha tiene tatuado alguna cosa. Le pregunto que significa, ella dice mariposa. Realmente no parece una mariposa siquiera como símbolo pero he de creerle. La mesera me pregunta si estoy listo, si se lo que quiero. Yo he estado toda mi vida tratando de saberlo. ( He tenido la ilusión en un cristal que me delimita el espacio convirtiéndome cual mosquito que ha entrado a chupar sangre y después de saciado regresa a una planta a morir). Digo, no se lo que quiero. Ella me da tiempo.

Otra servidora mira nuestra mesa y pregunta por su propina. Finjo no saber. Mi mesera pide con sus ojos no ser delatada. Le pierdo todo el respeto que podría sentir por el símbolo en su mano. La otra mesera piensa que soy un ladrón.
La cuestión aquí es la existencia de Dios para ver cuanta maldad existe. Mas si no hay un Dios que nos mire deberíamos hacer cualquier cosa.

No hay comentarios: