5 de abril de 2013

Caridad Atencio

























Qué hacer con una herida a lo lejos.

En el cristal de tu ojo pasa una imagen invisible.

Del árbol las ramas por nacer son presionadas contra el techo,

y las raíces aparentan que vuelan

atadas a unas sogas sobre un fondo de piedra.

Tus raíces se enredan en ti mismo,

se alimentan de ti y te devastan

como caballos

viviendo su galope en su propio latido.








De una estancia en el norte

No hay comentarios: