1 de septiembre de 2011

Marianne Moore




















A un caracol

Si “la condensación es la principal gracia del estilo”,
tú la tienes. Lo contráctil es una virtud,
del mismo modo que lo es la modestia.
No es la adquisición de alguna cosa
que sirva de adorno,
o la casual cualidad que acontece
en conjunción con algo bien dicho
lo que apreciamos en el estilo,
sino el principio oculto:
a falta de pies, “un método de conclusiones”;
“un conocimiento de los principios”
en el curioso fenómeno de tu cuerno occipital.









No hay comentarios: